El Perú enfrenta una paradoja: aunque la recaudación fiscal, especialmente del IGV, es alta, estos fondos no benefician adecuadamente a la ciudadanía. Insólito que el 80% de lo recaudado se destina al gasto corriente y solo el 20% a infraestructura, perpetuando desigualdades y carencias en servicios básicos. Lima concentra la mayoría de la recaudación, mientras las regiones quedan rezagadas. La estabilidad económica no se refleja en mejoras tangibles para la población. Es imperativo que la ciudadanía exija una gestión más eficiente y transparente de los recursos públicos, orientada al verdadero progreso social y no solo al mantenimiento del aparato estatal.
Recaudación tributaria: Un País Rico en Recaudación, pero pobre en ejecución de proyectos de Inversión
Es momento de que la ciudadanía tome conciencia y reclamar lo que en justicia nos corresponde, se necesita un uso responsable y eficiente de los recursos que tanto esfuerzo nos cuesta generar.
(americasistemas.com.pe. Lima, Perú – 28 de agosto 2024) El Perú, un país con vastos recursos naturales y una economía que ha logrado resistir las embestidas de crisis globales, enfrenta una realidad que es una oportunidad única. La recaudación tributaria, particularmente el Impuesto General a las Ventas (IGV) e impuesto a la renta de tercera categoría, han alcanzado cifras históricas, convirtiéndose en el pilar de las arcas estatales. Sin embargo, cuando se observa detenidamente hacia dónde se dirigen estos fondos, surge una pregunta inquietante: ¿realmente se está destinando a Proyectos de Inversión que cierren brechas sociales?
En cuanto a los Ingresos tributarios recaudados por SUNAT, 2007 al 2023 (millones de soles) han pasado de S/ 58,477 a S/ 171,185 millones de soles, que representa un crecimiento de 2.93 veces. Para el año 2023 en Tributos internos se ha recaudado S/ 130,221 millones (76.07%) donde el IGV (36.90%) e impuesto a la renta de Tercera categoría (21.64%) son los principales tributos; asimismo, en Tributos aduaneros se ha recaudado S/ 40,964 millones (23.93%) donde el IGV (86.40%) es el principal tributo.
Es significativa la participación de las regiones Lima Metropolitana (61.64%) y Callao (23.36%) en los Ingresos tributarios del año 2023, en comparación con el resto de las regiones (14.69%). En Tributos Internos por Región, en Lima Metropolitana se recaudó S/ 106,056 millones (81.44%), mientras que en Tributos Aduaneros en la región Callao se recaudó S/ 34,031 millones (83.08%). En la contribución fiscal resaltan Lima Metropolitana y Callao con un desequilibrio económico entre regiones y que debería analizarse para lograr una mayor participación de otras regiones. Cebe preguntarse si con la entrada del Puerto Chancay ¿la Región Lima tendrá importante recaudación del Tributo Aduanero como lo es Callao?
Pero lo más alarmante es la calidad de la ejecución presupuestal, en el periodo 2007 al 2024 el presupuesto público nacional de los tres niveles de gobierno ha sido S/ 2,936.90 billones de soles, de los cual es se ha destinado a Presupuesto de Actividades o gasto corriente S/ 2,161.06 billones (73.58%) y en Presupuesto de Proyectos S/ 775,845 millones (26.42%). Dicho de otra manera, este enorme presupuesto, que debería estar mejorando condiciones de vida de los ciudadanos a través de inversiones en infraestructura y servicios públicos, se diluye en cada año por el aparato estatal, en salarios, pagos de deuda, consultorías y otros gastos que no generan un impacto directo en la sociedad. En la práctica, solo el 17.57% de estos recursos se ha destinado a ejecución de proyectos de inversión en obras de infraestructura, esas que tanto se necesitan en un país con serias carencias en educación, salud, seguridad y transporte.
La contradicción es evidente. Por un lado, se celebran los logros de una moneda estable y una economía que sigue creciendo a pesar de los desafíos. Por otro, se observa con desilusión cómo este crecimiento no se traduce en mejoras significativas para la población. Es un círculo vicioso donde el país recauda más, pero invierte menos en lo que realmente importa.
Este fenómeno tiene consecuencias palpables. Las brechas en infraestructura son cada vez más notorias especialmente en las regiones, que a pesar de contar con fondos significativos, no se han podido cerrar las brechas en educación, menos en salud, sectores críticos para el desarrollo a largo plazo de cualquier sociedad. ¿De qué sirve tener dinero si no se sabe, o no se quiere, usarlo de manera efectiva?
Es aquí donde el ciudadano debe Despertar. El dinero que el Estado recauda, gran parte del cual proviene del bolsillo de cada uno de nosotros a través del IGV no está siendo aprovechado para generar un impacto positivo en nuestras vidas. Esto no es solo un problema de mala gestión, sino de prioridades equivocadas. Es imprescindible que la ciudadanía tome conciencia de esta realidad y exija un uso más eficiente y transparente de los recursos públicos.
La estabilidad económica de la que tanto se habla debe reflejarse en mejoras tangibles para todos los peruanos, y no solo en cifras que pintan un panorama optimista en los informes de recaudación fiscal. El verdadero éxito económico se mide en la calidad de vida de los ciudadanos, en la posibilidad de acceder a servicios públicos de calidad, en la construcción de una infraestructura que nos permita desarrollarnos como país.
El Perú tiene los recursos. Ahora, más que nunca, necesita voluntad política y una ciudadanía vigilante que exija que estos recursos se utilicen de manera correcta. No podemos seguir permitiendo que el dinero que sale de nuestros bolsillos y de las empresas, se pierda en un mar de gastos corrientes. Es hora de que la recaudación fiscal se traduzca en progreso real, en obras que beneficien a todos y no solo en mantener el status quo de un sistema que necesita urgentemente un cambio.
El crecimiento en la Recaudación no se correlaciona al cierre de brechas en nuestro país, tenemos todo para prosperar, pero que sigue atrapados en prioridades que no están alineadas con las necesidades de su población. Es hora de romper este ciclo y reclamar lo que es justo: un uso eficiente, eficaz y económico de los recursos que tanto esfuerzo nos cuesta generar.
3 Comentarios
Juan Huertas
Los ciudadanos y empresarios que trabajan en la formalidad generando Impuesto a la Renta y pagando IGV o ISC en sus compras, no podemos seguir tolerando tan baja eficiencia, eficacia y falta de criterio económico en los tres niveles de gobierno. Somos un país de tributación centralizada en Lima y Callao, sin mayor generación de tributos internos desde las regiones. Pasan los años sin cierran brechas de servicios públicos y cada año se diluye más presupuesto en gasto corriente, estamos comprometiendo la capacidad económica de las futuras generaciones
angel rodriguez
7. Reforma Tributaria
Nueva escala de renta a empresas
RENTA IMPONIBLE TASA
Con utilidad antes de impuestos Hasta 50 UIT 10%
Por el exceso de 10 UIT y hasta 400 UIT 30%
Por el exceso de 400 UIT 40%
se ha elaborado un software para probar diversas alternativas
al disminuir la tasa del IGV que afecta a todos los peruanos el ciudadano de a pie siente el beneficio, al subir la tasa de impuesto a la renta alrededor de 50 mil empresas sienten el cambio según la SUNAT se tiene 14,800 principales contribuyentes, se estima que 50 mil tienen utilidades antes de impuestos mayores a 1100 UIT.
hay que considerar que los impuestos indirectos, en este caso el IGV, son impuestos regresivos, esto significa que aquellas personas más pobres terminan pagando una proporción mayor del impuesto que una persona con más recursos económicos. Por otro lado, un impuesto directo como el impuesto a la renta tiene la ventaja de ser un impuesto progresivo, con el cual las personas con más ingresos pagan proporcionalmente más que las personas más pobres.
Como se puede apreciar al reducir la tasa de IGV a 12% y subir la tasa de renta en escala de 10%, 30% y 40% se incrementa la recaudación en 2,019 millones de soles porque se reducen las devoluciones por compras de las empresas exportadoras en 5,059 millones al bajar el IGV, y el ciudadano de a pie siente que bajan los precios.
Además, se debe eliminar las exoneraciones al IGV Ojo Público identifica que el Parlamento busca incrementar los beneficios tributarios a empresas cuando las cerca de cien vigentes ya le han costado al país cerca de S/120,000 millones en los últimos siete años es decir 17,148 millones por año, para el 2023 el monto alcanzó los S/20,354 millones por leyes dadas por fuerza popular 4 de las 6 leyes de exoneración tributaria.
Para reducir el déficit se necesita eliminar exoneraciones tributarias por 15 mil millones y aplicar esta reforma tributaria.
Recurrir a emisión de bonos aumenta la deuda, el servicio de la deuda el año 2019 fue de 9.1% y el año 2023 11.3%, se ha incrementado en 24.2% en 4 años, esto muestra la mala gestión de los 4 últimos gobiernos.
J. Escalante
Los impuestos son un robo SIEMPRE. Buscar incrementar la recaudación es robarle más a las personas/empresas. La única diferencia entre la SUNAT y un asaltante, es que la SUNAT te roba recurrentemente… la SUNAT es como esas bandas que todos los meses/días cobran cupos para que los negocios puedan trabajar.