La Comisión de Justicia del Congreso aprobó que en todas las notarías del país se utilice el sistema de comparación biométrica de huellas dactilares para verificar la identidad de los ciudadanos que tramiten testamentos, actas de transferencias de bienes muebles o inmuebles, de aportes de capital para la constitución de empresas, entre otros documentos que se gestionen ante los registros públicos.
La iniciativa busca acabar con la suplantación de identidades en los trámites notariales y que constituye una modalidad de fraude porque incluso sería posible detectar imitaciones de huellas dactilares.
Para la implementación de esta futura ley, una notaría solamente deberá requerir una computadora y un lector de huellas dactilares y se utilizará el servicio que actualmente presta el Reniec. Se calcula que actualmente el 16% de las notarías no utiliza el sistema de comparación biométrica de huellas dactilares porque la actual legislación dice que es facultativo lo cual no garantiza la seguridad jurídica en los procedimientos que se llevan a cabo a cabo a nivel notarial.