El consultor en negocios, Gustavo Menéndez-Bernales nos dice que después de muchos años en que la práctica médica viene intentando implementar la telemedicina, el coronavirus ha generado una excelente oportunidad de hacerlo correctamente y con el apoyo, consenso y participación de todos los agentes involucrados en los sistemas de salud público y privado. Hasta ahora y a pesar de los muchos años que se lleva intentando implementar la telemedicina o telesalud, varios obstáculos han limitado su adopción y uso.
Coronavirus y la Oportunidad de Implementar Telemedicina en la forma correcta
El Instituto Nacional del Niño del distrito de San Borja viene a ser un claro ejemplo a imitar, señala el especialista.
(americasistemas.com.pe. Lima, Perú – 25 de marzo 2020) La resistencia natural al cambio, la dificultad de cambiar los protocolos y procesos de atención en un entorno tradicionalista, las limitaciones regulatorias, la adopción temporaria como “piloto” y no como una práctica normal, la indefinición del modelo de financiamiento adecuado y la priorización de la tecnología por sobre la práctica médico asistencial han conspirado contra el éxito de la telemedicina.
La crisis actual presenta una nueva oportunidad de adoptar la telemedicina en forma generalizada y correcta. Al mismo tiempo la urgencia genera el riesgo de que se adopte como un mecanismo ad-hoc por un tiempo, en forma apresurada y que, pasada la crisis, fracase o vuelva a quedar relegada. Para hacerlo bien y perdurable, tanto los políticos como los directivos públicos y privados del sector salud deberían de involucrar a los expertos y basarse en la evidencia practica para establecer programas de telemedicina de urgencia y de largo plazo.
El ejemplo del Instituto Nacional de Salud del Niño de San Borja podría ser un modelo a considerar tanto en la implementación de la telemedicina a largo plazo como en la aplicación de la misma para resolver la crisis generada por el coronavirus.
Como modelo de largo plazo, el INSN SB ha implementado un programa de teleconsulta remota médico-especialista en tiempo real, con y sin paciente presente que ha generado un gran impacto medico asistencial y económico. Lo hizo mediante un trabajo integral de participación multidisciplinaria y un programa progresivo y creciente de implementación y de gestión del cambio. Este enfoque le ha permitido alcanzar recientemente más de 2500 teleconsultas de más de 60 hospitales de todo el país. Este programa no solo ha eliminado más del 50% de los traslados de pacientes del interior a Lima, sino que ha reducido un 30% los plazos de diagnóstico y tratamiento, ha capacitado a médicos y personal de salud “en la práctica” y en sesiones especiales de entrenamiento generando un círculo virtuoso de colaboración a nivel nacional.
Además, ha generado ahorros y eficiencias para el sistema de salud que superan los 40 millones de soles. También ha producido un gran impacto social facilitando la asistencia de los niños a la escuela, el cumplimiento laboral de los padres y favoreciendo la economía de las familias más necesitadas. Todo esto lo ha hecho dentro del marco regulatorio actual, la protección de la praxis médica y la adopción de los más altos estándares médicos.
Basado en esta experiencia y resultados, el INSN SB enfrentó la crisis del coronavirus en forma inmediata, implementando en 4 días un programa de teleconsulta paciente-médico para reemplazar las consultas externas programadas en el hospital durante la queda obligatoria. Desarrollaron un protocolo especial, formaron un equipo de trabajo multidisciplinario con médica/os, enfermera/os, coordinadores, personal de TI y personal administrativo y adoptaron los teléfonos móviles y las aplicaciones más generalizadas que usa la población para prestar un servicio esencial. Desarrollaron un algoritmo detallado y estimaron los volúmenes de trabajo y el equipamiento tecnológico necesario, así como el uso de los sistemas de información disponibles. Por último, aseguraron un proceso para la entrega de medicamentos y el seguimiento del paciente post-teleconsulta.
El INSN SB es un ejemplo de cómo implementar la telemedicina tanto en tiempos de crisis como en el largo plazo, que debería seguirse a nivel nacional y regional, así como también en el sector privado.
Lamentablemente hemos visto en los últimos días entidades que priorizan el “marketing”, la imagen y la publicidad planteando servicios de telemedicina incompletos, sin respaldo operativo posible, sin viabilidad médica, tecnológica o legal y sin involucrar a los expertos. Implementar servicios de telesalud de este modo no solo sería un error y un incumplimiento de las responsabilidades sociales, sino que generaría un retroceso permanente en la prestación remota de servicios médicos para la población.
Sabemos que los tiempos de crisis nos ponen a prueba y nos desafían a sacar lo mejor de cada uno. Aprovechar las experiencias exitosas y sumar a la gente capaz y con experiencia concreta y real sobre la telemedicina debería ser el primer paso a dar tanto por las entidades públicas como privadas. Apalancar experiencias exitosas y replicar modelos en funcionamiento no solo asegurara su éxito sino también el mejor uso de recursos valiosos y escasos. La severidad de la situación nos obliga a dejar de lado protagonismos e individualismos y nos estimula al trabajo en equipo, con los mejores y los expertos para el bien de toda la población. (Gustavo Menéndez Bernales)
¿Quién es Gustavo Menéndez-Bernales?
Este profesional es el líder regional de Business Transformation de Cisco para LATAM, basado en Miami, Florida. Trabaja mano a mano con muchas de las compañías y gobiernos líderes en la región para ayudarlos a ser más competitivos y productivos a través de procesos de negocios efectivos y la implementación de tecnología.
En los últimos años, ha dirigido el desarrollo de la atención médica de Telemedicina en América Latina, implementando proyectos galardonados reconocidos por la Iniciativa de Salud Digital de las Naciones Unidas, la Unión Internacional de Telecomunicaciones y la Asociación Estadounidense de Telemedicina.
Un Comentario
Horacio Werner
me quedo con las palabras “Lamentablemente hemos visto en los últimos días entidades que priorizan el “marketing”, la imagen y la publicidad planteando servicios de telemedicina incompletos, sin respaldo operativo posible, sin viabilidad médica, tecnológica o legal y sin involucrar a los expertos. Implementar servicios de telesalud de este modo no solo sería un error”….
muy claro, estas intervenciones son básicamente un tema de procesos donde la tecnología es “solo la habilitadora”……