“No sé si es justo, solo sé que es cierto”

Frase de Daniel Peredo que parece resumir la tenue frontera que puede definirse a conveniencia entre la ética y la moral. Imaginamos que para un apasionado experto en fútbol, capaz de observar, analizar y divulgar con precisión un partido, o un campeonato o una trayectoria de un jugador, resulta sencillo discernir y sustentar qué jugador o qué equipo es mejor o realizó mejor campaña; y poder pronosticar algunos resultados, diciendo finalmente “fue un justo y merecido triunfo”. Sin embargo muchas veces, hemos escuchado de Daniel la frase que titula nuestro editorial, y es que a veces gana quien no lo merece, ni por desempeño, ni por antecedentes; sino a veces hasta por trafa o alguna otra mala manera.

“No sé si es justo, solo sé que es cierto”

El país registra momentos cruciales en su historia producto de personas donde la moral y la ética hace rato la han dejado de lado, el sector tic no escapa a ello.

(americasistemas.com.pe. Lima, Perú – 21 de marzo 2018) La moral tiene una base social, es un conjunto de normas establecida en el seno de una sociedad y como tal, ejerce una influencia muy poderosa en la conducta de cada uno de sus integrantes. En cambio la ética surge como tal en la interioridad de una persona, como resultado de su propia reflexión y su propia elección. La moral en el futbol es como el reglamento de la FIFA y la ética es como el Fair Play. La moral es como el Reglamento del OSCE para venderle al estado, y la ética es como algunas prácticas comerciales que con frecuencia denunciamos o que resaltamos. A propósito de la vacancia 2.0 hacemos esta breve reflexión.

En la política
Mañana jueves sabremos si el proceso de vacancia 2,0 habrá logrado que PPK dejé la presidencia por incapacidad moral permanente. Nótese que se incluye la palabra moral, sin mayor análisis ya que en realidad se trata de la ética del mencionado casi ex presidente. Y es que podría argumentarse que estamos tan acostumbrados a la meritocracia del vivo criollazo o del pendejo con cuello blanco y corbata, que se admira en secreto a quién supo hacerla y se forró de billete. Si fue en “one nomás”, mejor pe!!

Esa es la moral en el fondo escondida y reinante en la psiquis de muchos jugadorazos del sector, y que pesa como mochila con plomo sobre los hombros de algunos ¨monses¨ con ética que aún existen en esta parte del terreno de juego. PPK ha sacado a relucir su fuerza y dice que no es ningún débil y que luchará para no dejarse vencer, mientras que sus casi extintos avatares ensayan mil formas de desintegrar la frontera entre la moral reinante en la política y la ética casi inexistente del otrora Premier, ex Ministro de Economía, ex Presidente de Directorio de Pro Invesión, ex Ministro de Energía y Minas. Hoy abunda la evidencia que PPK manejó esta frontera entre la ética y moral (la perversa del sector público que roba pero hace obras) como los enganches del Loco Gonzáles (aquél salvadoreño que hace poco cumplió 60 años y que Maradona mismo lo calificó como el mejor jugador del mundo). Digerir a alguien así, con un liderazgo tan impostado como convenido, no convence a nadie.

En nuestro sector TI 
En este campo de juego que son las TICs también tenemos expertos conocedores, no solo del reglamento y las diversas formas de sacarle la vuelta; sino también especialistas en la manipulación de las especificaciones técnicas y/o requisitos mínimos de postor o alguna otra sutileza casi inadvertida para la inmensa mayoría.

Recordemos por ejemplo, las tuberías de bronce que deberían tener las instalaciones de un almacén de depósito de documentos que una licitación millonaria de digitalización exigía a los postores. Todos sabíamos que había una sola instalación en Lima que cumplía con ese y otros ridículos requisitos mínimos de postor, pero la moral imperante nos decía: Ya se la llevó, lo manejó bien y nuestra ética se convertía cada vez más en algo parecido a la del casi ex presidente.  Y no es por evitar citar a los anteriores, pero sucede que sobre estos otros ya no hay dudas y ya no están en el Gobierno.  Podríamos citar muchos otros casos más que jugando dentro del Reglamento, podrían catalogarse como premios anti Fair Play; como el infantil argumento de cierto informe de la SUNAT (elaborado por el tridente mágico de la INSI contratado por Shiguiyama) sustentando el contrato millonario con Microsoft debido a la condición de solución de misión crítica del Outlook. Pero lo dejamos aquí… nuestros ¨jugadorazos¨ aún no dan la talla internacional que se ve en otras latitudes.